Comentario de un cursante sobre el módulo 2 del Diplomado en Logoterapia en línea– María de Lourdes Castro Pérez
Por: María de Lourdes Castro Pérez
Un segundo módulo también muy interesante. He de confesar que la filosofía no es de mis pasiones pero he seguido con atención los contenidos porque sé que me ayudan a entender muchos conceptos de la Logoterapia. La triada trágica a la que hace referencia Frankl me parece muy interesante. En mi trabajo en consulta, veo constantemente este elemento en el proceso de duelo.
Sé que sobre el tema hay un módulo más adelante, sin embargo, lo que he observado durante mucho tiempo es cómo el sufrimiento puede tomar diversas caras, por ejemplo en el enojo. El enojo, me parece, es una manera de quedarse en el sufrimiento. El enojo es un sentimiento natural, puede haber muchos motivos en la vida para enojarse, pero cuando el enojo no se elabora y se resuelve se queda en sufrimiento. Y observo que muchas veces la culpa también se esconde en el enojo y vuelve a darse el sufrimiento. Y luego me surgen preguntas como, Qué pasa con las propias capacidades de una persona? Hay personas que tienen más herramientas internas para salir adelante que otras. Y entonces, cuando estas herramientas son pobres, cómo o dónde queda la capacidad de decisión? En la terapia vamos adquiriendo herramientas, nos vamos Dando Cuenta de muchas cosas y decidimos, o no, modificarlas o hacer algo con ello, pero quien no tiene esa posibilidad? Esa parte de “somos seres intencionales” me gustó. Creo mucho en que la intención que ponemos al hacer las cosas, vale mucho, inclusive a mis pacientes les hago ver que no se pueden juzgar por lo que hicieron ayer, con los ojos de hoy, porque la intención que pusieron ayer, o con la que actuaron ayer, no necesariamente es la que ven hoy. SUFRIMIENTO MUERTE CULPA Los Tipos de Sentido, también un tema muy interesante. Creo que muchas veces en la vida, vamos poniendo en práctica cualquiera de ellos. El problema es cuando se vive una experiencia dolorosa o extrema y nos envolvemos por completo en ello sin darnos cuenta que aquello es sólo una parte de nuestra vida, que no lo es todo, que aún ahí, enmedio de la tragedia, hay cosas que se pueden aprovechar de manera agradable, hay cosas que se pueden aprender, hay cosas que nos pueden hacer crecer espiritualmente, hay tiempos donde podemos trascender. Sí creo que muchas veces se confunde la espiritualidad con la religiosidad. Cuando estoy esperando que un Dios o un santo o una virgen me resuelvan la vida, o que cambien lo que no se puede cambiar, o espero que hagan lo que yo quiero o como yo lo quiero, me estaría perdiendo en una creencia religiosa. El grupo de tanatología que tengo actualmente, tiene como común denominador la pérdida de la mamá. Me llama la atención cómo, en general, se volcaron en resolver la salud de su mamá, no lo consiguieron, la mamá muere y tod@s (y no exagero al decir tod@s), perdieron su sentido de vida. No encuentran qué hacer ahora, no saben qué sigue, en qué ocupar su vida, cómo seguir adelante. Considero que un factor importante para encontrar o ver el Sentido de vida, es cuidar el estado de ánimo, el sentido de humor. Tener ganas de reír, de pasarla bien, de divertirse, aún enmedio de la adversidad, será un elemento para poder ver las cosas de diferente manera. No es que la desgracia o la mala experiencia se vayan a ignorar, es voltear a ver que hay otras cosas que también tiene la vida y se vale disfrutarlas. El ocuparnos en cosas agradables y divertidas nos ayudará a resolver mejor la situación crítica que vivimos. Sin embargo, muchas veces, la gente se llega a sentir culpable por reír, divertirse, enmedio de la desgracia. Pareciera que ambas actitudes son excluyentes.